Seguramente, si tienes un animal de compañía, habrás escuchado hablar millones de veces sobre la leishmaniosis. Pero ¿sabes exactamente lo que es? Se trata de una enfermedad muy común en los perros que debemos controlar e intentar prevenir.
Si es tu primera mascota, no te preocupes, porque vamos a explicarte todo lo que debes saber sobre la leishmaniosis: sus causas, efectos, prevención y su cura. Presta atención y conviértete en un experto en esta enfermedad y evita que tu perro la padezca.
Qué es y qué causa esta enfermedad
La leishmaniosis es una enfermedad crónica causada por un tipo de parásito llamado leIshmania. Es contagiosa y se transmite, principalmente, mediante las picaduras del mosquito flebótomo. Es importante destacar que no todos los mosquitos causan leishmaniosis: para que un mosquito pueda contagiar a tu perro, primero tiene que haber picado a otro perro con la misma enfermedad, convirtiéndose así en portador de leishmaniosis.
Si no se trata a tiempo, este parásito puede causar a tu mascota problemas de gravedad y, en algunas ocasiones, la muerte. Por ello es importante conocer todos los peligros y cómo tratarla y prevenirla para, así, conseguir que nuestro perro siga perfectamente sano.
El contagio de esta enfermedad se produce cuando un mosquito infectado con leishmania pica a un perro y le transmite estás larvas.
¿Cómo saber si mi perro tiene leishmaniosis?
Si nuestro perro, de repente, empieza a perder el pelo debemos prestar mucha atención. Sobre todo, si las pérdidas se producen alrededor de los ojos, orejas y la nariz. Puede que estemos ante una leishmaniosis cutánea.
Si, además, empieza a perder peso, pero sigue con apetito, presenta heridas en la piel (especialmente en la cabeza y las patas) debemos acudir a un veterinario para que examine y diagnostique a nuestro perro. De todas formas, os dejamos un listado con los síntomas, aparte de los ya mencionados, más comunes de la leishmaniosis para que la identifiquéis de la forma más rápida posible y el veterinario pueda actuar cuanto antes mejor:
- Inflamación de ojos
- Orina con sangre
- Diarrea
- Conjuntivitis y dermatitis
- Cansancio extremo y debilidad
- Atrofia muscular
- Fiebre
- Inflamación del abdomen
- Hemorragias nasales
El tratamiento tendrá más éxito si se inicia en las primeras fases de la enfermedad, de ahí la importancia de realizar análisis anuales. Aplicando el tratamiento tu perro podrá tener una calidad de bastante buena (a excepción de las revisiones y medicación frecuentes). Por tanto, es importante prevenirla para que nuestra mascota no sufra ni padezca los problemas causados por la leishmania.
Si mi perro tiene leishmaniosis, ¿puede curarse?
Como ya hemos mencionado, la leishmaniosis es una enfermedad crónica por lo que, hoy en día, todavía no tiene cura. Sin embargo, el veterinario puede diagnosticar el grado de la enfermedad y proponer un tratamiento que permita a tu mascota llevar una vida bastante normal.
Además, los tratamientos no pueden garantizar que el animal se estabilice. Esta enfermedad puede dejar secuelas muy graves e incluso provocar la muerte. Por ello, es importante adelantarse y prevenir que nuestro perro sea portador de esta enfermedad.
Previene la leishmaniosis
Lo importante es que, después de leer toda la información, no te asustes porque con una prevención y unas medidas determinadas podemos reducir notablemente el riesgo de que nuestro perro se infecte con este parásito.
En primer lugar, se deben evitar las picaduras de los mosquitos. Cuando llega el calor, los mosquitos empiezan a acechar. Por ello, siempre que sea posible, debes dejar que tu perro duerma en un recinto cerrado para prevenir que los mosquitos acudan a él. Sobre todo, en verano y primavera. Evita los paseos con tu perro en las horas de máxima actividad del mosquito, el amanecer y el atardecer. Recuerda que debes tapar con mosquiteras las ventanas y comprobar que tu perro se encuentra perfectamente y no tiene ninguno de los síntomas detallados anteriormente.
Además, para prevenir la leishmaniosis se deben seguir una serie de pautas:
- Existen pipetas y collares que repelen el mosquito que transmite la leishmaniosis, por lo que es importante que respetes las fechas de aplicación.
- Por último, aplícale a tu mascota una vacuna contra la leishmaniosis
La leishmaniosis es una zoonosis, es decir una enfermedad que se puede transmitir de animales a personas, y puede producir graves problemas en personas inmunodeprimidas y en poblaciones de riesgo, pero debe quedar muy claro que no existe posibilidad de contagio directo entre animales o entre animales y personas. Sólo es posible la transmisión mediante el mosquito.
Todas las dudas sobre la leishmaniosis y sobre los tratamientos de prevención que tengas debes consultarlas con tu veterinario para que, conociendo a tu perro, te aconseje sobre los mejores tratamientos y vacunas para tu mascota.
¿Sabías todo lo que podía suponer esta enfermedad? Ahora que ya conoces todos los síntomas, causas y métodos de prevención de la leishmaniosis, recuerda que puedes evitar que tu perro enferme. Y siempre, ante cualquier duda o síntoma, llevar a tu perro al veterinario para que los profesionales puedan curar a tu mascota. Y si tienes más dudas sobre la enfermedad, también puedes preguntarnos a nosotros y te ayudaremos en todo lo que podamos y en lo que no, te indicaremos algún veterinario al que puedas acudir con tu mascota.