Tener un animal de compañía es una gran responsabilidad. El dueño de la mascota debe estar correctamente formado e informado en cómo se debe cuidar a un animal. Si es la primera mascota que tienes, es recomendable seguir todos los consejos, información e indicaciones de tu veterinario. Para ello, tanto propietarios como veterinarios debemos tener en mente aquellas cosas más relevantes para que nuestra pequeña mascota viva feliz y sana.
Una de las cosas más importantes es saber qué alimentos podemos, o no, darles a nuestras mascotas. Pese a que la mayoría de las veces, los perros suelen comer productos específicamente pensados para ellos es muy común que, sin que te des cuenta, pasen sigilosamente a la cocina a por algo de comer y sin ellos saberlo, empiecen a ingerir algo que les cause problemas de salud. Sea cual sea el caso, debemos estar prevenidos para que los perros disfruten de una salud de 10. Por este mismo motivo, en este post vamos a explicar qué cosas puede causar el malestar digestivo, e incluso la muerte de los perros. ¡Presta atención!
Comida prohibida
El chocolate es uno de los alimentos que más disfrutamos las personas. Sin embargo, para los perros puede ser muy peligroso e incluso puede llegar a causar la muerte. Los vómitos y la diarrea son los síntomas más frecuentes que nos indican que el perro ha sufrido una intoxicación por culpa del chocolate. Además, si este envenenamiento es a dosis altas, puede causar problemas cardíacos y temblores, a veces provocando el fallecimiento del animal.
Las uvas y pasas son otro alimento que se debe evitar debido a que, al comerlas, el perro empieza a sentir dolores en el estómago y en el intestino, llegando a provocar finalmente una insuficiencia renal. Normalmente, los síntomas empiezan a las dos horas de haber comido, cuando empiezan a vomitar. Sin embargo, es importante acudir a un veterinario para que examine cómo está el perro y cómo puede mejorar.
¿Qué sería de la comida española sin el ajo y la cebolla? Para los perros sería maravilloso ya que estos alimentos pueden causar daños severos a estos animales. Si un perro come ajo y cebolla en grandes cantidades, estos alimentos destruyen los glóbulos rojos y causan una anemia hemolítica en el animal.
Con tan solo unas pocas nueces de macadamia, podemos causar una intoxicación en los perros. Los síntomas más frecuentes son los vómitos, hinchazón de las articulaciones, dolor muscular y debilidad general. En casos más graves, los perros pueden sentir hipotermia, mareos, temblores y fiebre. Por último, el alimento más de moda entre las personas que viven una vida sana es el aguacate, pero para los perros es una fruta prohibida. A causa de la persina que contiene, el perro puede sufrir una intoxicación al ingerir aguacate, provocando diarreas y vómitos.
¿Qué no puede beber mi perro?
Lo primero que debemos saber es que un perro no puede beber café: son mucho más sensibles a los efectos de la cafeína que las personas y su ingesta puede tener graves consecuencias. Hiperactividad, vómitos, ritmo cardíaco acelerado, envenenamiento, diarrea, espasmos e incluso la muerte, son los síntomas que sufre un perro cuando toma café. Los primeros síntomas aparecen una hora después de la ingesta y, dependiendo de la cantidad, puede tener una mayor o menor gravedad. En cualquier caso, debemos acudir al veterinario y asegurarnos de que nuestra mascota se recupere.
Un perro que haya bebido leche puede mostrar síntomas como diarreas, vómitos e intentos constantes de vomitar y gases debido a que la mayoría de los animales no producen en su organismo la encima lactasa (encargada de procesar el azúcar de la leche, la lactosa).
Es probable que no tengas dudas respecto a ello, pero nunca se debe dar alcohol a un perro, ni a ningún animal. Las bebidas espirituosas pueden causar daños graves en la salud del animal. Los cambios de comportamiento, el daño renal, problemas respiratorios y cardíacos son los problemas más frecuentes. En algunas ocasiones, puede suponer la muerte del perro.
Otros elementos que puede ingerir y que no debería
Los productos de limpieza, raticidas y los combustibles son líquidos que, bajo ningún concepto, ningún animal ni persona debe ingerir puesto que ello puede provocar severos problemas. Entre ellos, pueden producir irritación en la boca, garganta y tubo digestivo; pueden aparecer vómitos, diarreas y cólicos intestinales; dificultades respiratorias que pueden provocar ahogamientos; causar una intoxicación severa e incluso la muerte. Así que procura mantenerlos en algún mueble cerrado y fuera de su alcance.
Por otra parte, todas las sustancias estupefacientes, setas tóxicas y tabaco van a provocar graves daños en la salud del perro. Entre ellas: vómitos, diarrea y una intoxicación severa para el animal. En algunos casos, y dependiendo de la sustancia ingerida, puede causarles un estado de shock y, además, puede conducirlos hasta la muerte.
Nuestro perro puede estar acostumbrado a comer otras carnes y pescados en el pienso que se les administra. Sin embargo, hay una clase de animal que no deben ingerir nunca: los anfibios. Todos ellos cuentan con un mecanismo de defensa que los convierte en venenosos. Por ello, en el momento que ocurra debes acudir a un profesional. La intoxicación suele manifestarse con problemas circulatorios y nerviosos, e incluso llegar a convulsionar.
Los medicamentos quedan absolutamente prohibidos para los perros. En caso de que el perro se encuentre en mal estado, siempre se debe acudir al veterinario y no administrarle una dosis de lo que tomaría el propietario. Esto puede resultar muy peligroso, y causar fallos hepáticos, hipoglucemia e incluso, la muerte a las mascotas.
Como es evidente, tampoco debe ingerir ningún objeto ni plantas ornamentales, pues el plástico (o cualquier otro material) con el que están fabricados puede provocarles vómitos y diarreas. Además, en algunos casos puede causarles asfixia o cortarles por dentro, llegando incluso a fallecer.
Por tanto, es importante conocer los posibles peligros que puede sufrir un perro e intentar evitarlos. Y, sobre todo, ante cualquier accidente, recuerda que debes acudir a un veterinario cuanto antes para que la salud de tu mascota peligre lo mínimo posible.